Espejismo

Y un día,

tu andar por esta ciudad

comenzó a parecer un sueño,

algo que nunca existió.

Y un día,

el viento de mis mañas

dejó de susurrarme tu nombre,

y me abrazó la calma.

Y un día,

todo de vos se convirtió

en un espejismo,

presencia inmaterial

que habitaba en mis suspiros.

Y un día,

dejó de ser compartido

el caminar estas calles,

tan mias, tan (no) tuyas.

Te diría daría un abrazo a la distancia,

te regalaría un pedacito de paisaje,

me quedaría en vos como estos cerros,

pero esta vez

prefiero habitarme

en lo que no llegó a ser,

y encontrar el universo entero

que todavía que me espera.

Saturnus.